Elegante frutero de cerámica portuguesa compuesto por un plato blanco decorado con hojas turquesas en relieve que sostiene una variada colección de frutas vidriadas. El conjunto presenta piezas de gran realismo que incluyen una manzana roja, un tomate, un limón, plátanos, una pera verde-marrón, uvas moradas, una berenjena verde y pequeños frutos rojos, todas elaboradas con cerámica esmaltada de brillantes colores. Las frutas están dispuestas artísticamente entre hojas de cerámica turquesa que aportan contraste y frescura a la composición. Esta pieza decorativa ejemplifica la rica tradición cerámica portuguesa, conocida por su colorido y detallado modelado naturalista. Obra artesanal en excelente estado de conservación, ideal para decoración de mesa, vitrina o aparador, aportando un toque mediterráneo y tradicional a cualquier ambiente. Pieza coleccionable que combina valor ornamental y artístico.